calma chicha

Nosotros, como otros muchos, tenemos la tripulación a punto, la embarcación en perfecto estado, las velas extendidas e, incluso, el rumbo perfectamente diseñado. 

Podemos seguir mejorando todo ello y perfeccionando nuestro saber para una mejor navegación pero de nada sirve... 

¡¡¡CALMA CHICHA!!!

Desde 2012 se han instalado en nuestros mares y océanos. Y no es que no soplara muy favorablemente  en los años anteriores, pero por lo menos.. soplaba!

Dos años, y vamos por el tercero de... calma chicha, ¡Esto no hay quien lo aguante!

Los meteorólogos que hemos contratado, un tal Rajoy, de Guindos, Montoro... no sé si los conocen, nos dicen que pronto se levantará el viento y podremos navegar.

Todos los días al alba mira las velas... calma chicha!

Quizás mañana ....

Vuelvo a mis quehaceres, preparo a la tripulación, limpiamos de nuevo la quilla, extendemos las velas...  Mi tripulación me pregunta: ¿Hasta cuándo?

Miro a la meteorología.... con el dinero que me cuestan... ¿Estarán en los cierto?

No me fío, pero quiero creer...

Muchas embarcaciones han tenido que deshacerse de su tripulación y muchos barcos esperan ser desguazados en los astilleros de medio mundo...

Nosotros aguantamos, pero mientras tanto... Calma chicha!

Ni una brizna... Es desesperante, frustrante, atenta contra nuestra salud y la de nuestra familia... Pero, quién ha parado esto?? Dicen que el viento se detuvo primero al otro lado del atlántico y me hablan de los hermanos Lehman... También me dicen que por allí ya sopla algo... sin exageraciones... pero los barcos navegan aunque con calma

A mí sólo me cabe pensar que para cuando sople el viento que me pille preparado. Quiero ser el primero en salir a navegar, quiero ser el primer barco de la armada...

Vuelvo a mirar... Calma chicha!

¿Quizás más adelante? Ya no lo sé...

Maleducators...

Este nuevo avatar o perfil profesional es en buena parte fruto de esta crisis que no cesa….

Con anterioridad a esta crisis ‘what crisis?’, un profesional que proveía de ideas o servicios a una empresa recibía como respuesta dos grandes opciones y una sola variante:

1.      NO

2.      SI

2.1.   Sí, pero no en este momento

Con la llegada de la crisis,  este escenario ha cambiado, la cosa se ha complicado y ahora nos encontramos con:

1.      NO

2.      SI

2.1.   Sí, pero no tengo presupuesto (entonces, es un "no" campeón)

2.2.   Sí, pero….(largo me lo fías)

2.3.   Sí, pero en el S. XXIII  (cuando las ranas críen pelo)

3.      Yo no decido (pues quítate de ahí)

4.      No contesta (ni seguramente sabe)

Ante este escenario, todos los que tenemos algo que “vender”, incrementamos nuestras dosis de ansiedad. Yo empatizo con todos ellos, durante muchos años he sido consultor y por tanto un "fenicio" ...

De hecho el 1% de la masa laboral en España se medica contra la ansiedad con eso que acaba en ____pan, y  casi el 3% sufre el síndrome de la  fatiga crónica.

No es ninguna broma aunque la ironía nos ayude a sobrellevarlo.

Yo siempre he dicho que un “no” es muy ilustrativo y pedagógico en la vida (como le sucedí al al gran Gila  con su padre...)  un “si” es un chute emocional y un “si” pero,… o un “no, no decido” o peor aún,  no responder... es una gran putada. A lo que muchos están contribuyendo sin asumir responsabilidad ni riesgo alguno… Éstos son una infamia... aunque si lo hacen parea salvar sus  vidas (profesionales se  entienda) , entonces son sólo  cómplices y la pena es siempre menor que para el autor del delito.

Maleducator, vete por dónde has venido… estás ahí para decir sí o no… ambas opciones son lícitas y por supuesto, morales, pero con respeto y educación

                      

Nuestro Gobierno acaba de crear un impuesto a la solidaridad y a la bondad….. O como ser un ciudadano responsable, puede salirle caro!!

El planteamiento derivado de la entrada  en vigor del Real Decreto Ley 16/2013 de medidas para favorecer la contratación estable y mejorar la empleabilidad de los trabajadores es claro y evidente.

Yo, Gobierno, (de uno u otro color), Yo, Estado, no soy capaz de cubrir buena parte de las necesidades en materia de conciliación, a diferencia de otros países como los renombrados nórdicos o centroeuropeos.

Como  consecuencia, las personas y la sociedad “sufre” y lo hace en mucha mayor medida que en otros países europeos.

Algunos, bien pensados, hemos invitado e insistido a las empresas privadas en que cubran, aunque parcialmente, estas carencias, llamando a su corazón. Y a eso lo solemos denominar RSE.

Cuando conseguimos convencer a algunas empresas que actúen de “estado”, ayudando a sus empleados a conciliar más,... hete ahí que se entera el del fisco y sacude un 40% de mordida a esta bondad.

En resumen, Estado no hago (¿por qué no puedo?) y espero a que otros en ejercicio de su solidaridad lo hagan, para en ese momento aplicarles una tasa a su generosidad. ¿Qué les parece?

Mi organización a pesar de todo va a seguir conciliando, pero lo digo bajito por si se entera “recaudator” no vaya a ser que nos cobre por ser algo más felices y mejores personas.

Por cierto, esto será de aplicación también para los políticos... Ya saben, ese café que se toman por debajo del precio de mercado, ese Ipad, esos días adicionales de vacaciones, el acceso preferente al Club de Campo...

¿Y en el caso de los funcionarios que el empleador es el Estado? ¿Quien va a pagar guarderías, agencias de viaje, moscosos, ayudas de todo tipo…? ¡nos va a salir caro!.

Y por último... No dudo de que exista en esto un abuso como en otras tantas cosas. 

¡¡¡Arréglenlo que para eso les pagamos!!!