Decía el bueno de Balbino, un
lejanísimo pariente, a su jefe en la pequeña empresa de transporte en la que
trabajaba como mecánico…. “La familia es un atraso, ¡ya te decía yo!” Refiriéndose
a los continuas problemas e injerencias que provocaba el tener a los familiares
en el trabajo, y no le faltaba razón al bueno de Balbino.
Unas cuantas décadas después
existen consultores especializados en protocolos familiares o en cómo mantener
a la familia “a raya” sin que se inmiscuya demasiado en lo de la olla,…
Y ahora llega el veranito,
hacemos nuestros más firmes propósitos y nos metemos en el coche, ese espacio
tan reducido, los 4 ó los 5 ó los 3 (la verdad es que cada vez más son 3) pa meternos
entre pecho y espalda 5 horitas de viaje, y lo que es peor, dos semanas de
convivencia 24 x 7 non stop.

Hay una estadística que nunca uno
sabe si no es una leyenda urbana, que dice que el número de divorcios y
separaciones aumenta exponencialmente en verano y no me extraña. Porque en el
día a día, cada miembro de la familia tiene su, … aquél! Van y vienen. En
ocasiones puede pasar todo un día en el que, a lo sumo, te hayas cruzado por el
pasillo arqueando una ceja.
Pero ahora llegan 15 días en los
que hay que consensuar desde la hora del desayuno, al qué se desayuna, la hora
de la playa, el sitio pa comer, etc, etc. Vamos que a las 10 a.m. tú te quieres pirar, porque además no sé si es
una sensación sólo mía, pero cada vez está más difícil esto de negociar con tus
hijos, cada vez son más déspotas y tiranos, buscan un hedonismo y un nihilismo
exacerbado y así, no hay forma.
De entre todos los conflictos
familiares en verano el que se lleva la palma es el wifi o mejor la ausencia de
wifi. En su ecosistema, saben dónde hay o pueden chupar wifi para estar
omniconectados, pero en cuanto les cambias las condiciones del entorno entran
en pánico, y ahora se vuelven y te vuelven, esquizofrénico.
Otro aspecto bien curioso que
nuestra generación no practicaba es el fenómeno redes sociales o más
concretamente Instagram. Yo estoy del insta hasta las propias napias y encabezo
varias recogidas de firmas para prohibir su uso y existencia.
Que si mira fulanito que foto
manda de las Rocky Mountains, o fulanita otro año en Londres y nosotros en esta
mierda de playa, que nos cuesta 3000 €
pero … deploramos.
¿Cuándo se darán cuenta que la
fotito de turno de entre sus 1000 contactos es el 1% que ha tenido la suerte de…?¿Qué
pasa con el otro 99%? Pues que el que está en el
pueblecico allá en la Ciudad Real profunda y no sube la fotito, vamos ni se le
ocurre! sólo lo hace el colega que está en sitio envidiable y que a lo mejor (o
lo peor) jamás vuelve ni a éste sitio ni a otro.
Ay! Las redes sociales….
Si a esto le sumamos la porquería
de la arena, el hecho de coger 3 kilos los dos primeros días, la pasta que te
gastas pa estar en la mierda playa y la parienta / pariente todo el día
expectante …. Concluyes ¿Vacaciones en familia? Un atraso!
Conciliator 2.0 has been here!!
Que la fuerza os acompañe!!
PS. Y con este post, será hasta
septiembre que me voy pa la playa a disfrutar de … ¿la familia?