¿Cuál es tu opción de teletrabajo?

Al hilo de la reciente campaña que hemos lanzado sobre el teletrabajo  y de manera transversal con otras organizaciones y movimientos de la sociedad civil, como Malasmadres y la Federación Española de Familias Numerosas, o profesionales como AEDIPE, me han preguntado si yo teletrabajo (de verdad), y cómo lo hago. Creo que no se fían...

En primer lugar, antes de que pierda vuestra atención, firmad por favor sino lo habéis hecho aún, nuestra campaña https://www.change.org/p/gobierno-de-espa%C3%B1a-por-un-20-por-ciento-de-teletrabajo-en-2020.

pues queremos pasar del exiguo 6,7% de teletrabajadores actuales, a un 20% de empresas, y  a un 20% de teletrabajadores en 2020. Así todo, cuadradito!

No hay razones para no estar en estos niveles  más allá de los meramente culturales y de resistencia al cambio, como podéis leer en nuestro Libro Blanco del Teletrabajo que por cierto  podéis descargar en www.flexibilidadyteletrabajo.com.

Bueno, retomemos el sentido del post de esta semana y que pone el foco en las casi infinitas posibilidades que admite el teletrabajo o trabajo flexible o ya, si nos ponemos estupendos flexible working o smartworking.

Cada persona es distinta y en un entorno de máxima flexibilidad no sería de extrañar que eligiera modelos distintos, ¿Por qué todo el mundo debe teletrabajar un día o dos a la semana?

Ahí va mi caso que como siempre digo, no soy ejemplo para nadie pero soy ejemplo para todo, pues uno es clase media y me adhiero al montón.

Mi modelo de teletrabajo es, cuando los viajes me lo permiten, el siguiente:

Teletrabajo todos los días de 8.30 h a  …? Cuando Waze me dice que el tráfico está ok en mi zona, que equivale a una duración del trayecto inferior a 30’ desde mi domicilio al lugar de trabajo. Si es más de 30’ no salgo, ¿para qué? ¿Para estar en un atasco haciendo nervios y contaminando? Yo en casa, miro correo, primeras llamadas, videoreuniones, etc.

Por cierto, trato de no poner ninguna reunión en Madrid antes de las 10 a.m. Puede que alguien me califique  de “perezoso”, pero entonces  proponga a su interlocutor a las  8.30  h am  , sin duda verá como opta por 10 a.m..

Al final para su interlocutor suele ser también una buena opción.

Así pues teletrabajo habitualmente entre 30 – 45 ‘   y 5 días / semana.

Además Teletrabajo 3 tardes por semana. Esto quiere decir que puedo ir a almorzar a casa y continuo allí por la tarde.

En mi casa comemos tarde pues mis hijas están ya  creciditas y salen 14.30 h o más de los instis y facultades.  Así pues  almuerzo de 14.45 h a 15.15 h aprox., cafecito y finalizado el telediario (algún día cabezadita) y a las 16.00  otra vez en marcha!

Eso si en zapatillas y chándal (con sólo parte de bajo por si hay Skype) hasta las 18.30 h cuando comienzan otras actividades como el gym, compras, trámites o mi segunda gran profesión, ejercer de chófer de la familia.

Luego por la noche una vez cenado, otra ratito de work pues en LatinoAmérica es hora punta, y además se me ocurren bastantes cosas tras repasar twitter y prensa. Esto viene a suceder como de 21.30 – 22.30 h, mientras veo “El Hormiguero” que no me requiere mucha atención la verdad.

Con todo ello, y si me habéis ido siguiendo mi jornada laboral es de 8,5 – 9,5  horas / día, que ya está bien para un Conciliator 2.0 y de unas 6 – 7 horas los viernes.

Obviamente, viajes nacionales, internacionales, conferencias y otros extras que hay que atender, incrementan algo la jornada anual, pero tampoco me obsesiona como directivo trabajar mucho, sino trabajar bien. Me pagan por tomar buenas decisiones, por dirigir y proyectar un equipo, yo lo tengo claro.

Esta es mi opción, ¿y la vuestra?

¿Por qué tenemos que coincidir todos?

Yo creo en la persona y en su libertad individual y en su responsabilidad y nada va a cambiarlo.

Una última cosa para finalizar. Por favor erradicar de vuestro discurso corporativo el “en mi empresa hay un teletrabajo ocasional”

¿Qué es eso?

Hombre! Si un colaborador tiene a su hijo con fiebre (por no decir, se está muriendo) le permitimos quedarse con él, ¡hombre, sólo faltaría!, esto no es teletrabajo,… es humanidad!,  lo contrario crueldad!! Por Dios!!

A mí nunca me digáis que habéis puesto en marcha un teletrabajo ocasional, no es una medida de conciliación. Recordad!

Conciliator 2.0 has been here!!

Que la fuerza os acompañe!!

De lo femenino y “lo” feminista

A mí me gustaría que este mundo que estamos reinventando entre todos, fuera mucho más femenino. Aunque sólo sea por egoísmo, pues vivo rodeado de mujeres a las que quiero, provengo de una de ellas, y siempre he tenido un lado muy femenino en mi vida, lo que no me ha impedido también ser muy masculino.

De manera inconsciente, me dediqué a la Protección del Medio Ambiente, como ya he escrito, mi otra gran profesión junto con la conciliación, y ahí aprendí que el Planeta Tierra es nuestra madre y se llama Gaia, que la naturaleza también es nuestra madre. Por cierto, nunca llegué a militar ni a considerarme ecologista por razones similares a las que cuento en este post.

Posteriormente me dediqué a la protección de la familia, algo muy femenino, de ahí el “la”, y a la protección de la conciliación, otro “la” y ya tengo el “la, la, la” de la eurovisiva Massiel. No voy a insistir mucho más en lo de demostrar que mi vida personal y profesional siempre ha transcurrido por lo social, podría también contar que acogí a una “niña”, pero voy a dejarlo aquí.

Durante años no apoyé, sino que me impliqué del lado de la igualdad y del feminismo pues primero consideré que se necesitaba de verdad y segundo, que era algo transversal… Es decir, que podríamos converger personas de distintas culturas, ideologías, pareceres, credos, etc etc

Pero, ay amigos y amigas!, llegaron nuevos tiempos,… y el movimiento feminista se ha radicalizado.

No entiendo que tendrá que ver ser feminista con ir contra la economía de mercado o la empresa.

No entiendo por qué para ser feminista hay que estar en contra del varón, contra todos, oye!!

No entiendo cómo para ser feminista hoy en día hay que militar en determinadas ideologías de izquierda extrema.

Y como no lo entiendo, lo he apartado para ver si un día inspirado me pongo a ello, un día con calma. Claro que también tengo apartada la Teoría de Cuerdas desde que estudié física cuántica y me apasionó allá por los 80’s.

Veo que alguno otros y otras están como yo… por ejemplo Albert Rivera, loado líder naranja que ha tenido que inventar el feminismo liberal para no decir que como yo, esto no lo entiende ni hartico gaseosa, el pobre!

Así que, he decidido echarme a un lado hasta que las aguas se calmen, o hasta que la Providencia me inspire y pueda entender el porqué.

Mientras tanto, si me preguntáis sigo deseando un mundo más femenino con valores más femeninos, más emocional, más negociador, menos competitivo, más amoroso, donde se llore más, donde se abrace más, donde se ensalce y proteja la maternidad…

Sin embargo, observo que la Igualdad nos lleva a que las mujeres cada vez se parezcan más, y se comporten más …. como los hombres. Flaco favor!!

Conciliator 2.0 has been here!

Que la fuerza te acompañe!